Esta caminata se realiza en la cordillera de Domeyko, y comienza en una hermosa quebrada, en la que se pueden observar petroglifos de diferentes épocas. Después continuaremos caminando y llegaremos al costado de una ladera que hay que subir, una vez arriba tendremos una hermosa vista alta del valle del arcoíris.

La caminata comienza cerca de las vivificantes orillas del río Salado, a una altitud de 3.000 metros sobre el nivel del mar. La caminata continúa, alejándose gradualmente del abrazo del río y adentrándose en las áridas extensiones de la garganta circundante. Por el camino, los petroglifos de Yerbas Buenas, de 10.000 años de antigüedad, cobran vida y revelan historias de una época pasada en la que este lugar era una encrucijada de rutas comerciales y migratorias fundamentales.

Valle de Purilactis Izquierda
Valle de Purilactis Derecha

Serpenteando por senderos ondulados entre afloramientos rocosos y cuevas ocultas, la aventura culmina en el Valle del Arco Iris, con su encanto de otro mundo y sus acantilados multicolores y vibrantes. Al descender por este caleidoscópico país de las maravillas, se encontrará con su conductor en el lado opuesto, marcando el final de la ruta. Al final del día, disfrute de un merecido almuerzo, un homenaje culinario a los sabores de Atacama, antes de regresar a la comodidad del hotel.